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miércoles, 29 de marzo de 2017

AMNISTÍA


AMNISTÍA


Cada noche
una piedra de Caín golpea una cabeza
y la humanidad agoniza en la hierba.
Cada mañana
sutura la brecha y cicatriza la herida.
Cada noche
un corazón se retuerce como un pez en la arena
y se extingue en postrero suspiro el último latido.
Cada mañana
convulsiona eléctrico, absorbe el oxígeno
y bombea la sangre cíclica.

Muerte y renacimiento,
un recurso humano de permanencia,
vida recién nacida al amanecer
que intima en las horas con la hoz
y la voz de la vejez.

La noche desmiembra
el binomio que nos conforma,
amortaja el cuerpo,
templa los sentidos,
en un pacto quedo con la oscuridad
y una mente despierta aislada
de normas y éticas,
enjuicia la luz
y la dinámica de nuestra contienda.

En la mañana reposa una liberación,
un nuevo hablar de paz,
y otra vez una mentira,
un complaciente autoengaño
mientras vestimos el uniforme
y ocupamos las filas hacia el combate                                    
con galones y medallas
que no significan nada,
solo haber alcanzado una edad
sin morir en el intento.

No me pidas un poema de amor.

No me quedan palabras
en esta guerra solitaria
de sentimientos muertos.

MARÍA RAMOS GALLARDO. "METALINGÜÍSTICA EN VENA". EDITORIAL LINEAS DIFUSAS. 2016 ©

lunes, 27 de marzo de 2017

PLAYAS LEJANAS


PLAYAS LEJANAS


                                      A Francisco Aranda Cadenas

A él lo social le viene y va.
Se florece en caminos vespertinos
y arrastra, feliz, una carga de vigilia
malherida, tenaz, obsesiva
hacia el café
desde la lucidez al ingenio.
Hacia los seres en cordiales abrazos
y charlas como nenúfares flotantes
de acuarelas surreales.
Hacia el bar
donde los acuerdos son manos enlazadas
y miradas minerales de mar abierto
al pueblo que se despereza al alba.
Y todo le ahoga,
a pesar del oxígeno del contacto.

Y se va. Se vuelve al hogar,
caverna de oscuro creativo,
a iluminarlo
con cera de versos prendidos,
luz lírica a la deriva de los puertos
que arrastra corales de amores
abandonados en los varaderos.

Y ahora te vas, amigo, de verdad.
Te vas a beber la sal de otras playas
y nos dejas un hueco de resaca
donde regalaba sombra tu colosal estatua.

MARÍA RAMOS GALLARDO. 2017 ©